Hoy tengo ganas de compartir un libro. De muchas cosas que se pueden decir sobre él, una que no se olvidará será que es un libro CLARO, CONCISO y sin floreados. Habla de nuestro tiempo, de nuestra actual situación y fijo que muchos de nosotros ya hemos leido mucho sobre estos temas. Yo quiero compartir un párrafo:

“En la última ERA NEGRA de nuestro tiempo, podemos buscar los textos preservados de los pensadores, de Augusto a Ockham, y nos será imposible encontrar una sola página de criticismo hacia el entonces esquema social establecido, por muy irracional, feudal, absolutamente paternalista, apoyando el derecho divino de los reyes y de los demás alrededor. En la actualidad ¿es esto diferente? Podemos ver en algún medio de comunicación o en publicaciones universitarias un solo párrafo de desenmascaro claro del régimen global que condena un tercio de todos los niños a la malnutrición con mucha más comida que la necesaria disponible?

En un orden social como este, el pensamiento se confunde con la propaganda. Solo una doctrina es aceptable, y la casta de “padres expertos” prescribe las necesidades y las obligaciones de todos. La consciencia social es encarcelada dentro del rol de lógica ceremonial, funcionando completamente dentro del esquema recibido por las prescripciones exhaustivas del APARATO, protegiendo los privilegios de los privilegiados, con triunfos de la censura metódica y educación rigurosa, donde el único espacio para explorar el pensamiento se convierte en el constante juego de racionalizaciones en competición.”